Los entendidos en el asunto definen que la transformación digital de las empresas representa la cuarta revolución industrial apadrinada por el uso del internet y la tecnología aplicada y sus herramientas en sectores como el de la salud, del internet de las cosas (IoT), la inteligencia artificial (IA), el uso de macro datos (“Big Data”), el “machine learning” (ML), el “deep learning” (DL), la robotización de la industria, las impresoras 3D/4D, el “blockchain”, los drones, los vehículos de reparto automatizados, entre otros, forman parte de los elementos disruptivos de esta cuarta revolución industrial.
Esta disrupción tecnológica es el cambio radical e inmediato que conlleva trabajar una cultura corporativa de innovación con valores, con actitudes, con comportamientos, con procesos y con recursos que definen el nivel de madurez de la empresa en la transformación digital. Como consecuencia de lo anterior, se deben orientar esfuerzos y recursos en la formación de líderes transformacionales que gestionen un cambio gerencial ágil, centrado en el cliente y fuera de la práctica tradicional-convencional.
La transformación de las empresas/organizaciones su irrupción en los negocios presenta entre otros retos: presenta la urgencia de la formación de nuevos modelos de liderazgos, el cambio e innovación de la cultura organizacional, la digitalización que permita la multicanalidad y la omnicanalidad, la gestión de datos para modelos más rápidos, más eficientes y predictivos, así como aumentar la rentabilidad, sostenibilidad ecológica y la práctica de la economía circular.
Entre los obstáculos propios de la transformación digital se encuentran: la falta de una estrategia y su plan de cambio planeado, la falta de apoyo, la falta de medios, de recursos y requerimientos en la formación colectiva-grupal y de manera personal.
De acuerdo con los expertos, los nuevos liderazgos transformacionales que requieren estos nuevos tiempos de transformación digital deben capacitarse en conocimientos y prácticas digitales como la Ciberseguridad, el “Big Data-la inteligencia de negocios y la analítica, las realidades inmersivas como la realidad virtual, entre otras, la fabricación aditiva con impresoras 3D, la robótica, el “blockchain”, el “cloud computing”, la internet de las cosas, entre otras.
A nivel de las empresas/organizaciones que tomen la decisión de transformar digitalmente sus negocios deben tomar en cuenta la transición de la empresa digital, del comercio electrónico, del mercadeo-“Marketing” digital, de la digitalización de procesos, del énfasis en la Ciberseguridad, el desarrollo de la infraestructura de tecnología, la migración a la nube/“cloud”, la analítica de negocios que además permite analizar el retorno de la inversión/ROI, el talento digital y la migración al pensamiento digital que requiere la transformación digital de las empresas.
Como ejemplo el caso de una compañía europea, que ha dado el salto cualitativo como “Data Driven Company”, donde han establecido una “Data Unit as service” con el propósito de ser: una organización interconectada, orientar sus servicios y comercialización de productos centrados en el cliente y ser una empresa de aprendizaje continuo que cataliza la eficiencia del negocio y su correspondiente crecimiento.
En ese propósito de transformación digital, la empresa ha definido un plan de transformación y manejo del cambio, donde se trabaja en el pensamiento-entrenamiento digital y consecuentemente con el comportamiento digital.
En este proceso la empresa identifica como lecciones aprendidas, entre otras: el diseño y establecimiento de un plan transversal de transformación para todos los departamentos, la necesidad de contar con el soporte de la Dirección en las decisiones estratégicas y en la disponibilidad de los recursos económicos requeridos, acompañados de un plan de comunicación interna para todos los departamentos que oriente y facilite el manejo del cambio a la toma de decisiones basadas el análisis de datos.
El reto para que las empresas/organizaciones se mantengan en competencia en la generación y captación de valor se circunscribe en la decisión gerencial de transformarse digitalmente o no, luego el detalle será cuándo, por qué y para qué.
«Toda organización debe estar preparada para abandonar todo lo que hace para sobrevivir en el futuro». Peter Drucker